Cuarentena de una italiana en India

Annalisa Simeoli, italiana de Turín, residente en Goa, India, cuenta detalles de su vida cotidiana durante la cuarentena.

Por Irene Garcés Medrano*. Una historieta hindú narra de cinco ciegos que habían escuchado hablar de elefantes, querían saber cómo eran hechos y les trajeron uno ante ellos. El primer ciego, tocándole la trompa, dijo: es como una gran serpiente. El segundo le tocó un colmillo y exclamó: ¨no, lo que parece es una lanza puntiaguda¨. El tercero, tocando el costado del animal, dijo: ¨la verdad es que es similar al muro de mi casa¨. El cuarto, contorneando una pata, afirmó: ¨amigos, el elefante es como un gran árbol¨. El último que había tocado la cola dijo: ¨se equivocan todos, el elefante es similar a una cuerda con un moño¨.

Quien quiera describir la India se encontrará más de una vez en la misma situación. De este inmenso país que constituye un mundo variado y en sí mismo, completo y heterogéneo, se puede hablar con conocimiento de causa, sólo después de haberlo visitado.  Annalisa Simeoli,  joven italiana, de Turín, residente en Goa, India desde hace 5 años, nos cuenta detalles de su vida cotidiana durante la cuarentena decretada por el gobierno indio, el pasado 23 de marzo para contrarrestar la propagación de la pandemia del Codiv19.

IG: ¿En qué momento se detectaron los primeros brotes de coronavirus en India? AS: Los primero casos se presentaron en el Estado de Kerala, algunos jóvenes hindúes estudiantes en China, aprovecharon las vacaciones del Año Nuevo Chino para regresar ya enfermos. De inmediato el gobierno cerró la frontera con China y, luego, decretó el distanciamiento social.

IG:¿Cómo son sus jornadas con la cuarentena? AS: Desde que comienza la jornada, limpio, cocino, practico yoga y meditación para conocerme y mejorar mi estado físico. Dedico tiempo para hablar con mis padres  y tíos en Italia.  De vez en cuando salgo a caminar alrededor del espacio verde de la unidad residencial donde vivo y noto a alguien, que como yo, camina.  En realidad los hindúes no son para nada ´fit´, pero la cuarentena forzada hace que todos sientan la necesidad del  movimiento.

IG:¿Cuánto ha cambiado su rutina diaria? AS: Antes gran parte de mis jornadas transcurrían movilizándome en autobús o caminando para ir a mercar y hacer diligencias, alternado con lecciones de yoga,  almuerzos y jornadas  con amigas hindúes cuyos maridos trabajan. Mujeres que se cansan de buscar un empleo bien remunerado y sobre todo gratificante. En Goa, las fuentes de empleo son escasas y los salarios bajísimos.

 IG: ¿Qué teme? AS: Siento temor de la crisis económica que, en diferentes formas y dimensiones, aportará  a nivel mundial sufrimientos inimaginables, en especial a las personas de escasos recursos.  Situación que nos debería hacer reflexionar en un mundo cada vez más  globalizado, interconectado, rígido y, a veces, despiadado.

IG: ¿Desde cuándo empezó su interés por India? AS: A los 20 años empecé a interesarme de India, para mí era el sitio ideal por su historia, sus contrastes, sus tradiciones, la espiritualidad, la tierra del Buda, pero nunca contemplé la posibilidad de echar raíces aquí.  Son sorpresas que a veces la vida nos da. Viajé para especializarme como profesora de yoga, luego conocí a quien hoy es mi marido, nos casamos y decidimos vivir aquí. Sucedió todo por casualidad, me considero afortunada, este es un país hermoso que tiene muchas cosas para enseñar, al menos una vez en la vida, vale la pena visitarlo. Al mismo tiempo, tratándose de un territorio  vasto y densamente poblado, está lleno de contradicciones que no siempre son fáciles de superar.  Guardo gran respeto por todo, amor por mi marido, por su familia, pero no me siento parte integrante de la comunidad, después de cinco años,  todavía me siento huésped.

IG: Yoga para reforzar el sistema inmunitario… AS: Estudié contabilidad, diseño publicitario y frecuenté la facultad de Letras en la ´Università degli Studi di Torino´. Empecé a practicar yoga desde muy joven, como autodidacta y luego decidí especializarme como instructora.  Después de tantos años,  no he dejado de tomar lecciones y aprender. La yoga es una disciplina amplia que abraza muchos aspectos de la vida.  Entre otras, refuerza el sistema inmunitario y ayuda a descargar el stress, por ello aconsejo de practicarlo durante esta pandemia.

 IG: ¿Qué tipo de  Meditación practica? AS: La Meditación Vipasana,  “Mirar las cosas como son”. Dicen que es la meditación que practicaba el Buda,  hoy se enseña gratis en todo el mundo, en los centros que siguen las enseñanzas de S.N. Goenka.  Desde hace más de 20 años, es parte integrante de mi vida. He visto los beneficios, me ayuda a desarrollar mi propia conciencia y sobre todo,  me permite observar cada cosa desde una perspectiva amplia sin perder la ecuanimidad.

IG: ¿Tiene nostalgia de Italia? A.S. Hay  momentos en los que extraño algunas cosas, especialmente la parte laboral, he trabajado siempre en el ámbito cultural, en el mundo de los libros, del  cine. A veces extraño hablar la propia lengua con desenvoltura, los amigos, comprender y saber que los demás te entienden cuando hablas.  Aunque si cocino italiano y a veces hago una fusión entre ambas culturas, algunos sabores me hacen falta, sobre todo por qué  algunos productos no se encuentran con facilidad.   

IG: ¿Conoce escritores hindúes? AS: En India hay escritores excelentes, cuyos libros, en los últimos años  han sido traducidos en todo el mundo. Entre mis preferidos está Chitra Banerjee Divakaruni Sister of my heart (Hermana de mi corazón), extraordinario, con un estilo narrativo  que te encanta, esencialmente femenino. Rohinton Mistry, A fine balance (El perfecto equilibrio),  gran escritor para entender la cultura y la historia de India.  Está la escritora Arundhati Roy The God of small things (El Dios de las pequeñas cosas), ha publicado solo dos novelas y muchos ensayos, es líder y activista social en diferentes proyectos. Sus novelas se caracterizan por un estilo narrativo que no es simple para el mundo occidental, pero no por ello menos interesante, vale la pena leerla.

IG: ¿En los escritores hindúes modernos encuentra similitudes con algunos relatos latinoamericanos? AS: Clasificar los escritores hindúes es muy difícil, se trata de un Subcontinente enorme que abraza escritores muy diferentes, algunos usan lenguas nativas o el inglés, y con base en ello cambian tradiciones y costumbres. Ciertos escritores clásicos narran historias con divinidades, algo mágicas, impregnadas de enseñanzas filosóficas y espirituales. Con respecto a los escritores latinoamericanos es diferente, la hindú es una literatura fuertemente ligada a la cultura de la gente, al modo de pensar y de vivir.  Si se ama la literatura es justo el momento para conocer escritores hindúes porque encontrará cosas sorprendentes e interesantes. Me gustan ambos.

IG: ¿Piensa que esta Pandemia nos hará mejores? AS: Dependerá de nosotros mismos si logramos transformarla en una experiencia de crecimiento interior. Si seremos capaces de interrogarnos, de  no quedarnos en la superficie, de ir un poco más al fondo de las cosas.  

*Caleña radicada en en norte de Italia desde hace casi tres décadas, comunicadora, hortelana, cocinera y viajera por convicción. irenegarces1000@gmail.com